Tipos de hambre que puede tener tu hijo

– Hambre visual: El niño estimula el apetito a través de la vista. Son niños que se conectan a través de los ojos con la comida. Necesitan platos visualmente agradables, con colores y figuras que capturen su atención.

-Hambre olfativa: El hambre se estimula por los olores por lo que son muy importantes. Invítalo a que te acompañe a la cocina por un momento y trate de adivinar que le estás cocinando, asegúrate que la cocina siempre huela delicioso mientras preparas la cocina.

-Hambre auditiva: Este tipo de niños les gusta escuchar el crujido de los alimentos. Son niños que prefieren alimentos como los frutos secos y comidas como los Nuggets. Integra alimentos como las semillas de ajonjolí a los platos para que combines esa textura crujiente con los demás alimentos.

-Hambre del gusto: El niño en el que predomina esta hambre primero prueba un poquito y define si se come lo demás o no. Sin importar la presentación o el olor. Procura tener una sazón agradable que lo animen a probar la comida.

-Hambre fisiológica: Este tipo de hambre necesita de un estómago vacío, no necesitan más estímulos pues las hormonas del hambre hacen el trabajo-

-Hambre mental: Cuando el niño se logra conectar con la consciencia y la salud que le traen los alimentos, decide comer. El niño come porque sabe que le hacen bien, no por obligación o por cómo luce.

-Hambre emocional: Se fomenta desde la lactancia. Es el hambre que se conecta con los recuerdos y emociones. Aquí evocamos los buenos recuerdos que asociamos con la comida. Este tipo de niños necesitan presencia y atención familiar a la hora de comer, si estás viendo el celular probablemente no lo estás motivando.

Reconoces el tipo de hambre de tu hijo, esta semana dedícale un tiempo a observarlo y entender que tipo de hambre tiene tu hijo y experimenta con presentaciones diferentes para conectar con él a la hora de la comida.